En una tragedia que conmueve al sur del Líbano, al menos 22 personas han muerto y 124 más resultaron heridas tras desobedecer las órdenes de evacuación de las fuerzas israelíes. Los enfrentamientos entre las tropas israelíes y los militantes de Hezbolá en la región sur del Líbano han intensificado la violencia, dejando un saldo devastador.
Israel había instado a la población a evacuar la zona debido a los intensos combates en la frontera, pero muchos residentes decidieron quedarse, lo que incrementó el número de víctimas. Las autoridades libanesas confirmaron que las víctimas se encontraban en áreas cercanas a la línea divisoria con Israel, siendo alcanzados por los ataques aéreos y terrestres.
Este suceso ha aumentado la tensión en una región ya de por sí volátil, en medio de un conflicto que amenaza con expandirse aún más. La comunidad internacional sigue de cerca los desarrollos, mientras las organizaciones humanitarias instan a un alto el fuego y al cese inmediato de las hostilidades para evitar más víctimas civiles.
El sur del Líbano sigue siendo una de las zonas más afectadas por el conflicto, con la población atrapada entre las luchas de poder de grupos armados y las represalias de las fuerzas extranjeras. El futuro de la región se mantiene incierto mientras las negociaciones para la paz parecen lejanas.