En un emotivo reconocimiento, el alcalde de Quito, Pabel Muñoz, agradeció a los bomberos de la capital y otras ciudades por su valiosa labor durante el reciente incendio forestal que devastó más de 145 hectáreas en la urbe. Este incendio, catalogado como el más grave de los últimos 30 años, afectó varios barrios, incluidos Cumbayá, Guápulo y González Suárez.
Durante su informe semanal, Frecuencia Quiteña, celebrado en la Comandancia del Cuerpo de Bomberos de Quito (CBQ), Muñoz destacó la colaboración de los ciudadanos, a quienes llamó “héroes sin capa”. A partir de las 09:30 del martes 1 de octubre, se llevará a cabo un minuto de aplausos en honor a todos aquellos que contribuyeron en la atención de la emergencia.
El incendio, que se desató el 24 de septiembre, requirió la activación de diversas entidades municipales y del Gobierno. Las autoridades informaron que, además de los daños a la propiedad—15 casas y varios bienes públicos y privados afectados—, se atendieron a 380 personas por diferentes lesiones y 414 animales durante la crisis. Ocho bomberos resultaron heridos, pero afortunadamente no hubo pérdidas humanas.
Las instituciones educativas municipales participarán en el homenaje, mientras que el alcalde planea estar presente en la sesión de Concejo Metropolitano para rendir tributo a los valientes que enfrentaron esta emergencia.
