El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció que ha instruido al secretario del Tesoro, Scott Bessent, a detener la producción de monedas de un centavo debido a su alto costo.
Según Trump, fabricar un centavo cuesta más del doble de su valor nominal, lo que representa un gasto innecesario para el país. Este movimiento se suma a años de críticas hacia la moneda y busca reducir el despilfarro en el presupuesto nacional.
En 2023, la Casa de la Moneda informó que producir un centavo costaba 3,7 céntimos, un aumento atribuido al alza en los precios del zinc y el cobre.