Donald Trump ha sido una de las figuras más polarizantes y fascinantes en la historia reciente de Estados Unidos. Desde sus inicios como magnate inmobiliario hasta su entrada en la política y su paso por la Casa Blanca, ha construido una carrera marcada por el éxito y la controversia. Hijo de Fred Trump, un reconocido desarrollador inmobiliario, desde joven Donald estuvo vinculado al negocio familiar. Tras estudiar en la Escuela de Negocios de Wharton, comenzó su carrera en el sector inmobiliario, logrando construir un imperio con proyectos como el Grand Hyatt Hotel y la emblemática Trump Tower en Nueva York. Sin embargo, su camino no fue lineal: a lo largo de su carrera, Trump se enfrentó a la quiebra en varias ocasiones, negociando con decenas de bancos para reestructurar sus deudas y mantener su imagen como empresario exitoso.
Su popularidad alcanzó un nuevo nivel en 2004 con el lanzamiento del programa de televisión The Apprentice, que le dio exposición y lo convirtió en una figura de la cultura pop. Con un estilo carismático y un enfoque de negocios que mostraba dureza y resolución, The Apprentice no solo fue un éxito de audiencia, sino también la plataforma perfecta para proyectar la imagen de un empresario hábil y tenaz. Este programa, con millones de espectadores, cimentó su posición en el ojo público y alimentó su ambición de incursionar en la política.
En 2015, Trump anunció su candidatura a la presidencia desde la Trump Tower, un evento que marcó un hito en la política estadounidense. Su estilo directo y polémico, su discurso fuerte contra la inmigración y sus promesas de revitalizar la economía lograron captar la atención de millones de estadounidenses. En 2016, en una de las elecciones más reñidas y polarizadas de los últimos años, derrotó a la demócrata Hillary Clinton, convirtiéndose en el primer presidente en asumir el cargo sin experiencia previa en la política o el ejército.
Durante su mandato, Trump rompió con muchas de las normas tradicionales de la política estadounidense. Su administración impulsó una política migratoria restrictiva, incluyendo la construcción de un muro en la frontera con México, y adoptó una posición dura frente a China en temas comerciales. Además, retiró a Estados Unidos del Acuerdo de París sobre cambio climático, argumentando que priorizaría los intereses económicos del país. También implementó reformas fiscales que beneficiaron a las empresas y prometió «Make America Great Again», un lema que resonó entre millones de seguidores.
Sin embargo, su presidencia estuvo marcada por constantes escándalos y enfrentamientos con la prensa y la justicia. Trump fue llevado a juicio político en dos ocasiones, una hazaña sin precedentes en la historia reciente. Su manejo de la pandemia de COVID-19 generó críticas, ya que subestimó la amenaza del virus en sus primeros meses y se enfrentó a organismos internacionales. Al final de su mandato, no reconoció su derrota en las elecciones de 2020 frente a Joe Biden, desencadenando una serie de eventos que culminaron con el asalto al Capitolio el 6 de enero de 2021, cuando cientos de sus simpatizantes irrumpieron en el edificio en un intento de impedir la certificación de los resultados electorales. Este incidente provocó un segundo juicio político, en el cual nuevamente fue absuelto.
A pesar de los escándalos y las críticas, Trump no se ha alejado de la política. Con su candidatura para las elecciones de 2024, busca retomar el control de la Casa Blanca. A lo largo de esta campaña, ha prometido volver a priorizar la economía estadounidense, endurecer las políticas migratorias y fortalecer las fronteras. Sin embargo, su camino no ha sido fácil: enfrenta múltiples procesos judiciales, incluyendo acusaciones de obstrucción de justicia y falsificación de registros comerciales, aunque ha continuado su campaña. La contienda electoral actual, en la que se enfrenta a la demócrata Kamala Harris, ha vuelto a polarizar al país, mientras Trump reafirma su compromiso de «restaurar la grandeza de Estados Unidos» y mantiene un fuerte respaldo entre sus seguidores más leales.
Trump se ha mantenido en la mira pública a lo largo de los años, y sea cual sea el resultado de las próximas elecciones, su influencia en la política y la sociedad estadounidense es innegable. Su trayectoria, que abarca desde los bienes raíces hasta la televisión y la política, representa una mezcla de logros, controversias y desafíos que han marcado una era en la historia del país.
