
El número de fallecidos por el gigantesco alud que sepultó parte de Alausí, en la provincia de Chimborazo, ascendió a 23, a medida que los equipos de rescate logran recuperar cadáveres que quedaron atrapados entre la tierra y los escombros que dejó la montaña al derrumbarse.
La cifra de desaparecidos también se elevó a 72 y la de heridos creció a 37, según el último balance de la tragedia publicado por la Secretaría General de Riesgos.
Asimismo, las personas damnificadas por el desastre alcanzaron las 656, de ellas 170 que han quedado sin hogar y se encuentran alojadas temporalmente en albergues. Entre la infraestructura destruida se han registrado hasta el momento 57 viviendas, mientras que otras 163 presentan daños menores.