
Con imágenes de más de 30 metros de altura, colocadas en el cerro de El Panecillo, a 3.000 metros sobre el nivel del mar, se instaló en Quito el tradicional pesebre gigante, considerado el más alto de Latinoamérica.
El alcalde de Quito, Santiago Guarderas, indicó que con el encendido de las luces del belén empezó la época navideña.
El pesebre está constituido por San José, que tiene una altura de 38 metros; los Reyes Magos Baltazar y Gaspar de 35 metros y el Rey Mago Melchor de 33 metros.
Además, se configura la estructura de la cuna con el Niño, la estrella, el buey y el burro de seis metros de alto. La escultura de la Virgen de Legarda, que corona desde hace varios años El Panecillo, representa a la madre del Niño Jesús.
Mientra que para iluminar todas las estructuras se utilizan 1.200 metros de luces LED, que resaltan el belén en las alturas, mientras la ciudad se derrama a sus pies y termina, panorámicamente, formando parte del pesebre