
Familiares del migrante Jefferson Paúl Loja Flores, de 18 años, quien murió ahogado en un lago de EE.UU. piden ayuda al Gobierno de Ecuador para traer su cadáver al país.
Su padre, Julián Loja, visiblemente afectado, pidió ayudar para «a repatriar el cuerpo de mi hijo, nosotros no tenemos la plata para traerlo y darle cristiana sepultura”.
La organización 1-800 migrante informó sobre la muerte del joven oriundo de la parroquia Molleturo en la provincia del Azuay. Actualmente su muerte se encuentra en investigación y se presume que el chico murió ahogado. El cadáver está bajo custodia de un examinador médico. Le realizarán una autopsia para conocer las causas del deceso. Su cuerpo fue ubicado en el pequeño lago de Mixville Park en Connecticut.
Sus familiares informaron, desde los Estados Unidos, que salieron con un grupo de amigos a nadar en el lago y entraron en grupo. «Cuando salieron Paúl no estaba, lo buscaron en los baños y llamaron a las autoridades porque no aparecía, desde ayer (domingo) los buzos lo buscaban en el lago pero hoy se confirmó su deceso”.
Paúl era un migrante que llegó a Estados Unidos en un viaje de tres meses. Llevaba cinco en Connecticut en donde vivía con familiares y trabajaba en construcción.
“Los padres son gente pobre y humilde. Se endeudaron para que su hijo vaya a Estados Unidos y ahora esta desgracia deja en peores condiciones a la familia”, indicó un familiar de la víctima.