
Viviendas y galpones usados para el reciclaje de metal y plásticos fueron inspeccionados ante la sospecha de que receptaban cableado de la Corporación Nacional de Telecomunicaciones (CNT).
Delegados de la Dirección de Justicia y Vigilancia junto a funcionarios de CNT, con el apoyo de la Policía Nacional, verificaron las denuncias en 8 recicladoras ubicadas en la Isla Trinitaria, Av. 25 de Julio, Guasmo, cooperativa Viernes Santo y Fertisa por lo que fueron clausuradas.
Cinthia Burgos, especialista de control de la Dirección de Justicia y Vigilancia, indicó que estos negocios deben contar con «los permisos de uso de suelo y la tasa de habilitación para esa actividad económica, y al no contar con ellos se procedió con la clausura», aclaró además que existe la ordenanza que regula la operatividad de dichos lugares de acopio.
«Deben tener un metraje de 150 a 300 metros cuadrados, un área de carga y descarga, que la mayoría no cumple», acotó.
Rommel Pinos, responsable de Seguridad de CNT, destacó que el perjuicio a la comunidad al quedarse sin servicio es producto del robo de cables que luego son vendidos en recicladoras por el cobre que contienen.