
La Organización Mundial de la Salud (OMS) publicó su nueva Clasificación Internacional de Enfermedades (CIE-11), en la que ha recogido por primera vez la adicción a los videojuegos.
El llamado «gaming disorder» se encuentra dentro de la sección sobre «trastornos mentales, del comportamiento o del desarrollo neurológico» y va justo después del «gambling disorder», es decir, la ludopatía, con la que comparte definición y vocabulario, solo que sustituyendo la palabra «gambling» (apostar) por «gaming».
La Clasificación Internacional de Enfermedades que emplea la OMS incorpora el análisis de 1.6 millones de casos clínicos, que pertenecen a 90 países. Es utilizada por los profesionales de la salud para estandarizar su labor y obtener parámetros necesarios en relación a la elaboración de diagnósticos.
A través de su inclusión, asimismo, se busca mejorar las estadísticas disponibles sobre la adicción a los videojuegos en el planeta. El objetivo es visibilizar el problema para que los pacientes puedan acceder a un tratamiento.