
Hoy en Guayaquil fue el entierro de Freddy Laaz, quien murió evitando un robo en un local comercial.
Al servicio fúnebre asistió el presidente de la República, Guillermo Lasso, así como la comandante de la Policía, Tannya Varela, quien resaltó que el uniformado sirvió a la ciudadanía por 16 años y murió en cumplimiento del juramento que realizan los servidores: Dar la vida si fuera necesario.
La comandante Varela hizo un llamado a que la justicia sea coherente con el trabajo que realiza la Policía, puesto que la entidad da resultados todos los días pero pide que quienes ejercen la justicia lo hagan en función de quienes cumplen con la ley.
Esto porque un uniformado fue sentenciado a por haber quitado la vida a un delincuente y evitar que cometa otros delitos; también otro policía murió y quien lo mató estaba preso y ahora salió con arresto domiciliario.
«Necesitamos una ley que nos proteja, necesitamos jueces especializados para poder seguir trabajando», dijo Varela.