
“Solo quiero dejarles en claro a todos que no hay ningún tema que esté fuera de límites”, aclaró Oprah Winfrey al comenzar la esperada entrevista con el príncipe Harry y su esposa, Meghan Markle, poco más de un año después de abandonar sus deberes como miembros de la realeza y mudarse al sur de California, y en medio de una disputa con la familia real, conocida como “La Firma”, a la que la exactriz, de 39 años, acusó de lanzar una campaña de “falsedades” sobre la pareja.
La entrevista comenzó sin la presencia del príncipe Harry. Meghan Markle y Oprah, sentadas en el jardín de la casa de la presentadora, hablaron sobre la boda real y cómo fue para la actriz ingresar a la monarquía británica. “Fue como tener una experiencia extracorporal para la que estaba presente”, dijo sobre el casamiento. “Este no era solo nuestro día (el casamiento), sino un día que estaba planeado para el resto del mundo”, dijo la exactriz.
“Fui muy inocente, no sabía mucho sobre la familia real. Nunca busqué a mi marido en internet porque sentí que él compartía conmigo todo lo que necesitaba saber de él”, respondió Markle a la pregunta de Oprah sobre cómo se sintió al ingresar a una institución de tantos años, en referencia a la monarquía británica.
“No entendía completamente lo que significaba ser un miembro de la familia real”, añadió.
Durante los primeros minutos de la entrevista, Markle contó la anécdota de cuando conoció a la reina Isabel II. Dijo que estaba entusiasmada por conocer a la abuela de Harry y cuando estaban en camino a verla en el auto, él le preguntó si sabía hacer una reverencia. Ella pensó que bromeaba pero cuando se dio cuenta de que hablaba en serio entendió la importancia.
“Aparentemente hice una cortesía muy profunda, no lo recuerdo”, dijo Meghan. “Fue encantador y fácil y gracias a Dios no sabía mucho sobre la familia real o habría estado demasiado nerviosa al respecto”.
Pese a crecer en Los Ángeles y sentirse acostumbrada a ver celebridades, se dio cuenta de que “este es un juego completamente diferente”.
La actriz también habló sobre su difícil relación con Kate Middleton, la esposa del príncipe Guillermo, y un episodio relacionado a unos vestidos en donde su cuñada la hizo llorar unos días antes de la boda. Pero aclaró que después se disculpó con una nota y flores, por lo que no quiso entrar en detalles.
También añadió que Kate es una buena persona y criticó la polarización que se genera entre el público. “No tienen por qué elegir entre las dos”, dijo la duquesa de 39 años.
Oprah luego le preguntó: “¿Estabas en silencio o fuiste silenciada?”.
“Lo último”, respondió. “Desde el momento que empecé a salir con Harry me instruyeron que siempre respondiera ‘sin comentarios’. Pero yo hacía caso porque creía que me estaban protegiendo”.
Después me di cuenta que no solo no me estaban protegiendo sino que estaban dispuestos a mentir para proteger a otros miembros de la familia real.
Markle remarcó la diferencia entre los miembros de la familia y aquellos que manejan la familia real, “La Firma”. Además señaló que la reina siempre se portó bien con ella y que disfrutaba mucho de su compañía. “Siempre me hizo sentir bienvenida”.
Contó que no la dejaban almorzar con sus amigos. Salió de la casa solo dos veces en cuatro meses y eso la hacía sentir muy sola. “Sobre todo cuando vienes de una vida tan plena, cuando vienes de la libertad”.
La actriz luego habló sobre su embarazo y la llegada de su bebé, Archie, a la familia. “En los meses en los que estuve embarazada, me dijeron que Archie no iba a recibir un título y que no iba a recibir seguridad; también escuché comentarios sobre qué tan oscura iba a ser su piel”, reveló, aunque no quiso decir quién hizo los comentarios porque sería muy dañino para esa personas.
En uno de los momentos más tensos de la conversación, Markle se sinceró con Oprah y confesó que hubo un punto de quiebre y que tuvo pensamientos suicidas. “Ya no quería estar viva”, reveló. Incluso contó que asistió a un evento porque tenía miedo de quedarse sola porque no sabía qué podía llegar a hacer.
Además dijo que acudió a la “Institución”, es decir, varios altos funcionarios, para recibir ayuda o para que la ingresaran en un hospital, pero le dijeron que no se “vería bien”. Después de ser rechazada, Meghan dijo que se acercó a una de las mejores amigas de la princesa Diana. También describió sentirse cautiva, ya que su licencia, pasaporte y tarjetas de crédito fueron retiradas después de su boda y no estaban disponibles para ella.
Markle dejó un claro mensaje a la familia real. “No sé cómo pueden esperar que después de todo este tiempo sigamos callados si hay un papel activo que La Firma está desempeñado en la perpetuación de las falsedades sobre nosotros”, aseveró.
“Si el riesgo es que tengo que perder cosas, así lo haré. Ya perdí a mi papá, perdí a un bebé, y casi pierdo mi identidad. Pero todavía sigo aquí parada”, agregó.
En un nuevo bloque, el príncipe Harry se sumó a la entrevista y revelaron que esperan a una niña.
Los duques de Sussex habían anunciado que esperaban un segundo bebé el 14 de febrero de 2021, el día de San Valentín, exactamente 37 años después de que la princesa Diana anunciara su embarazo, pero esperaron hasta la entrevista con Oprah para revelar el sexo del bebé, que será una niña. No han anunciado un nombre.
La alegre noticia también llega a raíz de otra más triste, ya que a principios de año Markle anunció que había sufrido un aborto espontáneo en un artículo de The New York Times. Sin embargo, los dos dijeron que están emocionados y “extremadamente agradecidos” por el embarazo y la oportunidad de tener una hija. “¿Qué más se puede pedir?”, dijo Harry.
Oprah le preguntó a Harry si sorprendió a la reina con su anuncio de abandonar los deberes reales, a lo que respondió: “No. Tengo demasiado respeto por mi abuela”.
Con información de El Comercio Perú